8 claves para presentar un postre

En gastronomía a la hora de hacer un postre ya sean tartas, pasteles o cualquier otro, tan importante es el sabor como la presentación. A veces, incluso una mala presentación puede arruinar el mejor de los dulces. ¿Quieres destacar por tus postres? Te damos algunas ideas y sugerencias para presentarlos.
8 claves para presentar un postre

  • Hazte de unas buenas herramientas de trabajo
Aros para emplatar, plantillas para el azúcar glass o la canela, brochas de silicona, una manga pastelera, un biberón. Si quieres que tus postres  queden perfectos al menos ten estos utensilios básicos.
  • Elige un plato un vaso o una copa especial
Un postre mediocre en un bonito plato, vaso o copa resulta totalmente diferente. No dudes en escoger platos especiales que tanto por su forma como por su estampado o color realcen tu dulce.
  • No improvises la presentación
Si no sabes de emplatado lo mejor es que no improvises. Lo mejor que puedes hacer es mirar diferentes posibilidades de presentación para tu postre. Internet está lleno de ideas. Y no dejes de hacer fotos de los postres de los restaurantes, panaderías o de tu pastelería favorita. Te darán mucha idea. .
  • Aprende diferentes técnicas de emplatado
Emplatado rítmico, simétrico, asimétrico, triangular, transversal, lineal… Técnicas de restauración para los postres  hay muchas, échale un vistazo a cada una de ellas empieza a utilizarlas. Y si no te atreves empieza con los emplatados más clásicos y básicos, son una apuesta segura. Una tarta cortada en un bonito plato y adornada con unas hojas de menta y un poquito de nata montada es siempre un acierto.
  • Sé muy pulcro
Si un postre tiene gotas de salsa, por ejemplo desparramadas a lo largo del plato estás dando muy mala impresión del mismo. Limpia todos los bordes del plato y asegúrate que está impoluto antes de llevarlo a la mesa.
  • Presenta cada salsa según su consistencia
Si las salsas tienen consistencia preséntalas pincelándolas sobre el plato con un una brocha de silicona. Si por el contrario tienen una consistencia ligera ponlas como soporte del postre. En cuanto a las reducciones quedan muy bien puestas en gotas con la ayuda de un biberón de repostería. Y si son mermeladas, natas, cremas pasteleras o compotas utiliza una manga pastelera.
  • No sobrecargues el plato
Un plato demasiado decorado puede resultar algo vulgar e incluso poco apetecible. A veces un par de fresas y algo de nata, unas ramitas de hierbabuena o unas guindas pueden ser más que suficientes.
  • No adornes con elementos que no se puedan comer
No hay nada peor que estar delante de un plato en un catering, por ejemplo, y no tener claro si todo lo que hay en él se puede comer o no. No caigas en el error. Si usas flores o bolitas, por ejemplo, que sean comestibles.
Si quieres destacar por tu repostería recuerda: la presentación es tan importante como el postre en sí. Hazte de unas buenas herramientas, aprende unas cuantas técnicas de hostelería y no descuides la vajilla.

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